La Habana, 20 ene (PL) Un 16 de octubre de hace 14 años comenzó una nueva era en el fútbol mundial cuando un tal Lionel Messi, enfundado en la camiseta azulgrana del FC Barcelona, debutó entonces en la Primera División de la Liga española y ya nada volvió a ser lo mismo. Entre fantasía y martirio, el genio argentino de 30 años robustece cada semana una leyenda impresionante.
Su última gran hazaña la consumó hace unos días, con un gol de tiro libre magistral, ante la Real Sociedad en Anoeta, suelo hostil.
Con esa diana llegó a 366 en la Liga de España y se convirtió en el máximo goleador -en un único campeonato- de las cinco grandes ligas europeas, superando la marca de 365 de Gerd «el Torpedo» Müller, del Bayern de Múnich, en la Bundesliga.
Para alimentar el pseudo-debate, el portugués del Real Madrid Cristiano Ronaldo acumula 289 en el certamen liguero español y 376 en total si contamos los 84 que marcó con el Manchester United y los tres con el Sporting de Lisboa (0,75 por partido, mientras el argentino promedia 0.91).
Con dos temporadas más en el fútbol profesional, el delantero lusitano de 32 años archiva apenas 10 tantos más que Messi, un jugador capacitado para desempeñarse en todas las posiciones del frente de ataque y del centro del campo, que más allá de marcar goles dedica su talento a generar fútbol.
La nueva meta del crack sudamericano será alcanzar a los húngaros Imre Schlosser (411), Ferenc Szusza (393) y Gyula Zsengellér (387), al escocés Jimmy McGrory (410) y al yugoslavo Stjepan Bobek (403), quienes arrasaron en los campeonatos de sus respectivos países, de lejos mucho menos competitivos que el de España.
Más lejos queda el austríaco Josef Bican, el hombre con más goles en las ligas europeas, 518 en total, divididos en 447 en la liga checa y 71 en la de su nación.
Mención especial para el también húngaro Ferenc Puskas, la superestrella del Real Madrid en la década de 1960, quien sumó 514 tantos, 358 en su país y 156 con los merengues en España.
Suponiendo que Messi comience a marcar menos goles por temporada, algo normal debido a la edad, de todos modos podría alcanzar el récord absoluto de Bican (447) de más tantos en un único certamen.
Con una media de 20 dianas por campaña, número extremadamente asequible para el argentino, alcanzaría al austríaco dentro de cuatro temporadas -o menos- y encumbraría su leyenda hasta límites nunca antes vistos, muchos más para un jugador que divide su tiempo entre la delantera y el centro del campo.
Una cosa sí es segura, Messi tiene su asiento esculpido en oro en el Olimpo de los Muhammad Ali, Michael Jordan, Usain Bolt, Babe Ruth, Gary Kasparov, Michael Phelps, Eddy Merckx, Roger Federer (todavía en activo), Diego Armando Maradona y Pelé.
Pésele a quien le pese, vivimos en la era del genio Lionel Messi. Disfrutémosla mientras dure porque, como todo, no será eterna.
Obviamente, la grandeza provoca envidias. Sus detractores se agarran a un último e irrisorio resquicio: «Messi nunca ganó una Copa del Mundo».
Pero, ahora en serio, un título jamás podrá conspirar contra todas sus conquistas.
Por supuesto, no quiero ni imaginar que dirán esos escépticos arrogantes si por alguna casualidad llegara a alzar el cetro en el Mundial de Rusia-2018. ¿Solo a partir de ese justo momento sería mejor que Maradona y Pelé? ¿En serio?
(Tomado del semanario Orbe)
Lionel Messi: Un récord de ficción
Por Yasiel Cancio Vilar